«Creo que esta última parada era innecesaria»
– Kimi Raikkonen-
Aunque para los pilotos del podio no ha habido la real «fricción» que todos esperarían en los que a adelantamientos se refiere, el Gran Premio alemán desde ese templo que es Nurburgring ha sido una muy emotiva competencia, digna de ver y disfrutar, claro representativo de la Formula Uno moderna.
Sebastián Vettel ha tenido que aguantar estoicamente los embates de los ambiciosos rivales. Inició con excelente largada y tuvo que controlar todo el tiempo las amenazas detrás suyo. En sus declaraciones se percibe cuanta presión tenía en sus espaldas. Los Lotus de Raikkonen-Grosjean se la pusieron bien pequeña y recordamos a Hungría en 2012 con la misma situación solo que fue Hamilton y en un trazado mas «Noble» en esto de adelantar, el que llevó el escarceo incesante, interminable, persistente de los autos negro y oro.
Pero ¿Qué cambió? ¿Cómo es que Mercedes desapareció de escena? Pues si lo vemos en perspectiva, desde Malasia, el GP alemán ha sido el mas «caliente» en lo que a condiciones climáticas se refiere. Y no fueron solo los 42-45° que sábado y domingo se consolidaron en el asfalto sino una muy baja humedad (35%) que hicieron que las «revisadas» gomas Pirelli rindieran en mejor manera. Y miren pues, nadie se acordó de Silverstone en donde el escándalo llegó con tonos dramáticos acá a Nurburg, con amenazas de boicoteo. Fue un «Harlem Shake» temporal. Por ahora, Bernie Ecclestone y Paul Hembery se limpian el sudor y esbozan sonrisas de tensa satisfacción.
El sábado, Ferrari puso la nota clave de lo sumamente táctico que sería este Gran Premio. Los bólidos rojos tras rodar a incluso mejor ritmo en Q1 y Q2 que sus rivales, pusieron la nota sorpresa al disputar la Q3 con el compuesto mas duro. Mientras sus rivales directos apostaban a un «Stint» inicial corto el domingo con las mas blandas (Intermedias), en Maranello se abocaban a un remate «fabuloso» Todo, urdido desde el viernes en donde Pat Fry pudo notar lo muy consistente de la F138 en tandas largas y la imposibilidad de que a cualquier manera, se hiciesen de un «hueco» en la primera fila para el domingo. Alonso es muy bueno, quién lo duda, pero no es un paranormal de las calificaciones como si lo son Hamilton o… Vettel.
Y entonces, Lewis colgó el mejor crono sabatino ante la risible circunstancia que opacó a su compañero Rosberg. Luego de cuestionar el ritmo pendular del W04 el viernes, los locales de Stuggart dieron vuelta al auto y el moreno voló bajo en la Q3 para salir y amenazar con nueva victoria.
Pero nada, desde el mismo vamos, el Gran Premio Alemán se convirtió en una procesión de sacrificios para los bólidos plateados. Hamilton debió conformarse con un quinto lugar muy sudado tras sendos duelos en pista -El mejor con su némesis Alonso al que mantuvo a raya- y Rosberg apenas finalizando noveno.
La cosa se planteó entre Red Bull versus Lotus. Ambos motores Renault, ambos muy casados por razones distintas con la casa propulsora pero con una gran diferencia: El presupuesto para desarrollar sus monoplazas. Lotus regresó a la luz y puso a dos E21 muy bien balanceados a seguir la estela de Vettel de manera incansable. La oportunidad pareció cebarse en el raro momento en que Bianchi y Marussia detuvieron marcha por incendio en el exhausto Cosworth y luego, el tragicómico incidente del auto deslizando en reversa sin control y en solitario que obligó a la salida del auto de seguridad.
El reinicio, colocó a Lotus mas cercana de la precaria diferencia con Vettel pero el alemán se esforzó. Nótese que ni vuelta rápida obtuvo. Puro sudor y empecino para asestar el regreso de un local como ganador en Nurburgring tras ¡74 años de ausencia! Vaya estadística.
El finés terminó pegado a 1 segundo del germano que especula tantas versiones de que podrían compartir destino en un futuro inmediato. Un excelso Grosjean culminó en el podio. Lotus «instruyó» al suizofrancés para que dejara pasar a Kimi, claramente más rápido pero no tan capáz de plantar lucha por su cuenta al compañero de equipo. La orden, siempre repulsiva, no pareció incomodar al menos aventajado Grosjean pues se sabe en una situación nada cómoda para su futuro inmediato en Lotus y hasta en la Formula Uno.
En efecto, Fernando Alonso, se propulsó al final sobre el podio pero sin obtener recompensa. Pese a su conocida entrega, Alonso pudo entender que la estratégia de Ferrari era buena para pugnar al podio y compensar la ventaja rival en situaciones como estas pero no mas allá de intentar la victoria. El factor «desequilibrante» fue la excelente perfomance de Grosjean que terminó administrando ventaja sobre el campeón español.
Jenson Button consigue un sólido sexto lugar -Tomando en cuenta las circunstancias- con su manejo preciso y de relojeria mientras Mark Webber se convierte en héroe anónimo: Tras excelente largada y escolta a Vettel, ingresó a boxes y una gigantesca demora que incluyó el apagado del auto tras soltar una rueda mal ajustada, le relegó con vuelta perdida. Como será el rendimiento de Red Bull que el australiano remontó la cuesta hasta este punto.
Sergio Pérez también se incluyó en el protagonismo pero desde la muy luchada casilla. Mención especial a ese tractor veloz que es Nico Hulkenberg que posicionó el Sauber tras una muy luchada competencia, en el cierre de puntos.
Sin duda, la anécdota del auto de Bianchi se queda en pañales frente al hecho imponderable del camarógrafo herido por el auto de Webber y el caucho mal ajustado. Año extraño este si unimos la convalecencia del trabajador a la muerte del comisario en Canadá.
Lamentablemente para sus rivales, Vettel y Red Bull comienzan a oler a logro, a campeonato, a inexpugnables. Mercedes prueba que pese a sus enormes progresos, están algo lejos de ser realmente estables. Ferrari se complica la existencia en avatares técnicos ¡Cuanto necesitan de esos tiempos de ensayos ilimitados en tantos circuitos! y Lotus es un amenizador nada desdeñable que azuza, amenaza, constipa, molesta a sus rivales.
El hungaroring nos recibirá en tres semanas y con el tan mentado escenario de pruebas de pilotos jóvenes -Y no tanto- que ocurrirá en el interín.
FORMULA 1 GROSSER PREIS SANTANDER VON DEUTSCHLAND 2013